Sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, fe y pureza.
1 Timoteo 4:12
Un estudiante del ultimo año de la secundaria que fue honrado como uno de los “mejores y Más brillantes” de nuestra comunidad ha brindado una demostración convincente de integridad. Cuando el equipo de su escuela recibió la palabra “auditorio” para deletrear. Brady Davis bajó la mirada para meditar en su respuesta y notó que la palabra estaba impresa en la base del micrófono. Hizo notar esto a los jueces, quienes respondieron con una palabra más difícil. Brady hizo lo que sabía era correcto, ya sea que los demás lo notaran o no.
No sabemos cuándo nuestras acciones podrían convertirse en un ejemplo para los demás. Pero si vivimos cada día para honrar a Jesús, nuestro comportamiento será un modelo de Su justicia, sin importar quién esté observando.
A menudo, son los jóvenes quienes mejor expresan el idealismo y el entusiasmo. Pero la rectitud y el honor deben ser las metas de los cristianos de toda edad. Pablo de dijo a su joven protegido, Timoteo: “No permitas que nadie menosprecie tu juventud; antes sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, fe y pureza” (1 Timoteo 4:12).
Brady Davis dice que su meta en la vida es cambiar el mundo a su alrededor sin transigir jamás. Haríamos bien en unirnos a él en esta búsqueda de vida, integridad y comportamiento ejemplar.
Un buen ejemplo siempre hace un buen sermón.
1 Timoteo 4:12
Un estudiante del ultimo año de la secundaria que fue honrado como uno de los “mejores y Más brillantes” de nuestra comunidad ha brindado una demostración convincente de integridad. Cuando el equipo de su escuela recibió la palabra “auditorio” para deletrear. Brady Davis bajó la mirada para meditar en su respuesta y notó que la palabra estaba impresa en la base del micrófono. Hizo notar esto a los jueces, quienes respondieron con una palabra más difícil. Brady hizo lo que sabía era correcto, ya sea que los demás lo notaran o no.
No sabemos cuándo nuestras acciones podrían convertirse en un ejemplo para los demás. Pero si vivimos cada día para honrar a Jesús, nuestro comportamiento será un modelo de Su justicia, sin importar quién esté observando.
A menudo, son los jóvenes quienes mejor expresan el idealismo y el entusiasmo. Pero la rectitud y el honor deben ser las metas de los cristianos de toda edad. Pablo de dijo a su joven protegido, Timoteo: “No permitas que nadie menosprecie tu juventud; antes sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, fe y pureza” (1 Timoteo 4:12).
Brady Davis dice que su meta en la vida es cambiar el mundo a su alrededor sin transigir jamás. Haríamos bien en unirnos a él en esta búsqueda de vida, integridad y comportamiento ejemplar.
Un buen ejemplo siempre hace un buen sermón.
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